viernes, 11 de diciembre de 2015

FASES DEL ACOSO LABORAL










En esta oportunidad vamos a hablar acerca de las fases del acoso laboral. Para empezar no es fácil establecer una secuencia de los hechos durante el proceso de hostigamiento laboral que nos permita visualizar las fases desde su aparición hasta su desenlace. Esto por las características que en cada caso presentan los acosadores, las víctimas y el entorno en que se desarrolla el conflicto; además, depende también de si la organización es pública o privada. Cabe aclarar que el mobbing inicia cuando el acosador decide destruir psicológicamente a una persona.
  • Fase de conflicto o del incidente crítico
En esta etapa la víctima es señalada y perseguida por la forma de hacer su trabajo. El acosador se vale de todo tipo circunstancias, engaños, calumnias y humillaciones, tanto personales como profesionales.
No es de extrañar que en una organización integrada por personas con diferentes intereses y objetivos se presenten conflictos. El hostigamiento laboral no se debe confundir con los problemas que conlleva trabajar bajo las órdenes de una jefatura exigente ni con las dificultades que se pueden dar entre un jefe y sus subordinados o, bien, con los compañeros de trabajo, ya que eso puede solucionarse mediante el diálogo con el fin de evitar que el problema sea mayor.
    • Fase de Acoso y estigmatización
    En esta etapa la persona que es acosada empieza a quedar excluida y se le asignan funciones sin importancia o humillantes. Poco a poco se consolida el conflicto hasta convertirse en acoso laboral. De ese modo, el acosador o acosadores inician el proceso de hostigamiento de forma sistemática y por un tiempo prolongado con el fin de apartar socialmente a la persona que han escogido. Como este fenómeno surge de repente quien lo sufre al no entender lo que pasa ni el por qué de las actitudes y acciones que se empiezan a generar en su contra. Por su parte, el resto de compañeros y compañeras de trabajo al ver lo que pasa pueden adoptar una actitud pasiva o, bien, pueden sumarse al acoso laboral que se está orquestando.
    • Fase de intervención de la Dirección de la empresa
    En esta etapa, lo que en un principio era un problema conocido por los miembros del grupo al que pertenece la víctima, trasciende a niveles jerárquicos superiores. En este punto del conflicto en el mejor de los casos, la Dirección puede realizar una investigación del problema para tomar las medidas según corresponda. De comprobarse que el trabajador ha sido hostigado laboralmente se podría optar por cambiar de puesto al trabajador o al acosador, amonestar a este último por escrito por haber cometido una falta que se considera grave y dejando claro que no se va a tolerar ese tipo de acciones en ningún nivel de la estructura organizacional. Otra posibilidad es que se niegue la existencia del problema con lo cual la víctima queda en estado de indefensión y el acosador puede continuar con el maltrato que ha venido ejerciendo o, bien, se reconoce la existencia del conflicto, pero se minimizan las consecuencias dejando a la víctima indefensa al no considerarse la existencia del acoso laboral, la gravedad del problema y al no darse ningún tipo de sanción a este tipo de conductas abusivas.

    • Fase de solicitud de ayuda y diagnóstico

    Una vez que la persona reconoce que es víctima de acoso laboral debe buscar ayuda psicológica para sobrellevar el problema con el fin de evitar los estragos que esto puede generar en la salud de la persona que lo sufre; por ejemplo, ansiedad, tristeza, culpabilidad, sentimiento de indefensión, depresión, daño psíquico, entre otros. Es importante recibir asesoría legal para recibir orientación en cuanto a cómo proceder y a dónde recurrir si se desea plantear una denuncia. En Costa Rica las personas pueden dirigirse al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y a los Tribunales de Justicia; además, los empleados públicos puede acudir a la Defensoría de los Habitantes.


    • Fase de salida de la empresa o traslado de Administración

    En esta etapa la víctima decide cambiarse de trabajo, por lo que opta por presentar la renuncia como solución al conflicto que vive, pues considera que la organización ha hecho poco o nada por solucionar el problema. Asimismo, en la administración pública los trabajadores suelen solicitar un cambio de puesto de trabajo a otra oficina. 


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